Page 93 - ALERGIAS BÁSICAS
P. 93

Factores que influyen en el desarrollo y expresión del asma

               Factores genéticos: Estudios de detección genómica seguidos de estudios de asociación
               de genes candidatos y clonación posicional han identificado locus genéticos relacionados con
               un mayor riesgo de asma en determinadas poblaciones. El efecto de la variación genética en
               el  asma  y  en  los  fenotipos  relacionados  con  esta  enfermedad  muestra  una  gran
               heterogeneidad y podría estar muy influido por factores ambientales. Por tanto, muchos niños
               que padecen asma no tienen padres con esta enfermedad y muchos padres asmáticos tienen
               hijos que no sufren esta afección.

               Sexo: La prevalencia de asma es mayor en los niños que en las niñas en el primer decenio
               de  la  vida,  aunque  esta  diferencia  se  ha  reducido  en  los  últimos  estudios.  Sin  embargo,
               conforme se llega a la adolescencia, el asma de comienzo reciente es más frecuente en las
               chicas que en los chicos, sobre todo en las que presentan obesidad y pubertad precoz. En la
               edad adulta la prevalencia de asma es mayor en la mujer que en el hombre.

               Alérgenos: la exposición a alérgenos de exterior y especialmente de interior constituye un
               factor de riesgo significativo de asma alérgica.

               El desarrollo de IgE específica frente al huevo durante el primer año de vida es un índice
               predictivo  de  riesgo  de  enfermedad  atópica,  siendo  el  principal  y  más  precoz  marcador
               serológico

               de una posterior sensibilización a alérgenos inhalantes y del desarrollo de patología alérgica
               respiratoria.  Además,  cuando  la  alergia  al  huevo  se  asocia  a  dermatitis  atópica,  la
               probabilidad de presentar a los 4 años patología alérgica respiratoria se eleva al 80%.

               Infecciones:  Las  infecciones  virales  respiratorias  son  el  desencadenante  individual  más
               frecuente del asma en la infancia, constituyen el único desencadenante de las sibilancias y la
               tos  en  muchos  niños  y  pueden  agravar  el  asma  atópica.  Los  rinovirus  humanos  son
               responsables  de  la  mayor  parte  de  las  exacerbaciones  asmáticas,  mientras  que  el  virus
               respiratorio sincitial es una causa frecuente de síntomas respiratorios graves en los lactantes.


               Las infecciones respiratorias graves se asocian a persistencia del asma al final de la infancia
               ya que pueden dañar el epitelio de las vías respiratorias, causar inflamación y estimular una
               reacción inmunitaria y la hiperreactividad de dichas vías.


               Posteriormente,  las  infecciones  siguen  siendo  un  desencadenante  importante  durante  la
               adolescencia y en la edad adulta.


               Algunos  estudios  han  señalado  que  la  exposición  a  ciertos  virus  (p.  ej.,  hepatitis  A,
               sarampión), micobacterias o parásitos puede disminuir la incidencia de alergia y asma, y que
               las infecciones leves recurrentes pueden proteger contra el asma, pero por el momento no
               se dispone de datos suficientes de estudios de intervención para esclarecer esta relación y,
               en particular, su posible importancia clínica.

               Humo del tabaco: La exposición pasiva al humo del tabaco es uno de los factores de riesgo
               domésticos  y  ambientales  más  potentes  con  respecto  a  la  aparición  de  tos/sibilancias  o
               síntomas asmáticos recurrentes a cualquier edad durante la infancia. El humo del tabaco




                                                                                                       89
   88   89   90   91   92   93   94   95   96   97   98