Page 242 - ALERGIAS BÁSICAS
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síntomas nocturnos y el asma inducido por ejercicio. La prevención de cambios irreversibles
               de reestructuración en las vías respiratorias y alcanzar la mejor función pulmonar, así como
               evitar exacerbaciones sería el objetivo a largo plazo.

               Los objetivos del tratamiento, tanto en su vertiente de controlar los síntomas diarios (dominio
               control actual) como para prevenir las exacerbaciones y la pérdida progresiva de función
               pulmonar (dominio riesgo futuro), pueden alcanzarse en una gran mayoría de pacientes con
               un tratamiento adecuado.

               Es  importante  hacer  una  valoración  del  riesgo  de  futuras  exacerbaciones,  dado  por  la
               limitación  en  la  función  pulmonar,  así  como  por  la  presencia  de  efectos  secundarios  del
               tratamiento  a  pesar  del  buen  control  sintomático.  Otros  factores  de  riesgo  para  sufrir
               reagudizaciones  serían  la  presencia  de  exacerbaciones  durante  el  último  año,  pobre
               adherencia al tratamiento, mala técnica en el uso de inhaladores, tabaquismo, presencia de
               eosinofilia.

               El  tratamiento  se  ajusta  de  forma  continua,  con  el  fin  de  que  el  paciente  esté  siempre
               controlado. Esta forma cíclica de ajuste del tratamiento implica que el control del asma debe
               ser evaluado de forma objetiva, que se trata al paciente para alcanzar el control y que se le
               revisa periódicamente para mantenerlo. Es decir, si el asma no se encontrara bien controlada,
               el  tratamiento debe aumentarse en  los escalones terapéuticos  que  sean necesarios  para
               lograr el control, aunque antes de pasar al siguiente escalón terapéutico debemos siempre
               comprobar que realiza una correcta técnica de inhalación, el cumplimiento terapéutico es el
               adecuado  así  como  conocer  posibles  exposiciones  al  alérgeno  o  que  la  presencia  de
               síntomas se deba a otras patologías.

               Si  el  asma  ha  estado  controlada  durante  al  menos  tres  meses,  el  tratamiento  de
               mantenimiento  puede  reducirse  paulatinamente  con  el  fin  de  determinar  las  necesidades
               terapéuticas mínimas que son necesarias para mantener el control.

               Los fármacos para tratar el asma se clasifican como de control o “mantenimiento” y de alivio,
               también llamados “de rescate”. Los medicamentos de control o mantenimiento, que deben
               administrarse a diario durante periodos prolongados, incluyen glucocorticoides inhalados o
               sistémicos, antagonistas de los leucotrienos, agonistas beta 2 adrenérgicos de acción larga
               (LABA), teofilina de liberación retardada y anticuerpos monoclonales anti-IgE (omalizumab).


               Los  fármacos  para  el  asma  se  pueden  administrar  por  distintas  vías  (oral,  inhalatoria  y
               endovenosa), pero las ventajas de la vía inhalatoria hacen que ésta sea la de elección. Los
               dispositivos de inhalación más habituales son el inhalador presurizado, que se puede utilizar
               con  o  sin  cámara  espaciadora  (Volumatic®,  Aerochamber®,  Aeroscopic®,  Babyhaler®,
               Nebuchamber®,  Inhalventus®,  Prochamber®,  Optichamber®  e  Ildor®),  el  inhalador
               presurizado  con  solución  de  partículas  extrafinas  (Modulite®),  los  dispositivos  de  polvo
               (Turbuhaler®, Accuhaler®, Aerolizer®, Novolizer®, Handihaler®, Easyhaler® y Twisthaler®)
               y los nebulizadores (jet o ultrasónicos), cada uno con características diferenciales que deben
               considerarse al prescribirlos.

               La edad y la destreza del paciente son los factores más importantes para elegir el dispositivo
               más adecuado en cada caso. La utilización de hidrofluoroalcanos (HFA) como propelente en





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