Page 246 - ALERGIAS BÁSICAS
P. 246
de mantener este tratamiento mas de 3 meses se debe pautar tratamiento profiláctico de
osteoporosis.
La termoplastia bronquial es una técnica novedosa que puede considerarse en algunos
pacientes adultos con asma severa. Consiste en la aplicación de calor a través de un catéter
introducido en el árbol bronquial para tratar de adelgazar el músculo liso bronquial. Los
efectos podrían persistir durante 5 años. La técnica no se realiza en todos los Hospitales, se
hace de forma ambulatoria y consta de 3 fases.
LÍNEAS DE TRATAMIENTO
Disponemos de dos grandes líneas de tratamiento:
● Tratamiento de fondo: Glucocorticoides, Teofilinas, Cromomas, Antileucotrienos,
Agonistas Beta-2 de acción larga, Inmunomoduladores y Anti-IgE.
● Tratamiento de rescate: Agonistas Beta-2 de acción corta, Anticolinérgicos,
Glucocorticoides sistémicos.
Tratamiento de fondo
Glucocorticoides: constituyen el tratamiento de elección en asma persistente en todos los
niveles de gravedad. Derivan de modificaciones de los glucocorticoides naturales, que
intentan disminuir los efectos mineralcorticoideos aumentando la actividad glucocorticoidea.
Existen en su estructura diferentes elementos que les confieren efecto antiinflamatorio.
La corticoterapia inhalada se introdujo en los años 70 con el dipropionato de beclometasona,
utilizada inicialmente en casos graves de asma para extenderse con posterioridad su uso a
aquellos casos de asma persistente leve o moderada. En la actualidad los principales
corticoides inhalados son: dipropionato de beclometasona, budesonida, propionato de
fluticasona y de más reciente aparición, la ciclesonida.
Actúan a través de la unión a receptores citoplasmáticos que se traslocan al núcleo y regulan
la transcripción de genes relacionados con la respuesta inflamatoria. Se han descrito
diferentes mecanismos de acción cuyo efecto final es proteger al organismo del daño tisular
que ocasionaría una respuesta inmune exagerada. La inhibición de citoquinas pro-
inflamatorias, la inducción de apoptosis de células inflamatorias así como la eliminación de
antígenos extraños, toxinas, microorganismos y células extrañas son algunas de las acciones
de estos fármacos.
Su uso proporciona un efecto antiinflamatorio con una baja biodisponibilidad sistémica, por lo
que los efectos secundarios se reducen al mismo tiempo que consiguen reducir la intensidad
del asma, la hiperreactividad bronquial y el número de exacerbaciones agudas, mejorando la
función pulmonar y la calidad de vida. Actúan sobre el proceso de reestructuración de las vías
respiratorias; su introducción precoz y el tratamiento a largo plazo pueden prevenir el
desarrollo de la limitación crónica al flujo aéreo.
La mayoría de los pacientes responden bien a los corticoides inhalados, aunque en algunos
242