Page 134 - ALERGIAS BÁSICAS
P. 134

Epitelios y otros alérgenos animales

               Para los pacientes con síntomas y alergia comprobada por pruebas cutáneas, la prioridad es
               encontrar  otro  hogar  para  los  animales.  Los  alérgenos  de  tipo  animal  se  encuentran  en
               muchos tipos de tejidos: plumas, pelo, saliva, orina y caspa.

               El alérgeno de gato, Fel d 1, se expresa predominantemente en la piel del gato y se encuentra
               en escamas de la piel o “caspa” del gato. Fel d 1 tiene dos propiedades que le confieren una
               gran agresividad: su tamaño es pequeño (aprox 3 micras) permaneciendo en el aire durante
               horas, y son “pegajosos”. De esta manera los alérgenos de gato no sólo están en los hogares
               en que residen los gatos, sino también pegados a la ropa, en las escuelas y edificios públicos
               e incluso los hogares sin gatos. Esto cuestiona si son eficaces las medidas de evitación del
               gato para aquellos pacientes alérgicos a gato que no tienen un gato en su casa.

               En aquellos casos que no pueda retirar el animal de casa o lo tiene algún familiar:


                   ●  Retirar los reservorios tales como alfombras, sofás, cortinas y mantas.
                   ●  Limpieza con aspirador filtros HEPA.
                   ●  Lavar el animal: el lavado regular elimina grandes cantidades de alérgeno, pero debe
                       repetirse periódicamente, como dos veces por semana.
                   ●  Usar  productos  de  uso  tópico  que  disminuyan  la  carga  alergénica  del  pelo  y  las
                       escamas cutáneas, al desnaturalizar los antígenos correspondientes (Ej.: Vetriderm®
                       de Bayer).
                   ●  Evitar tocar el animal y procurar lavarse las manos después de hacerlo.
                   ●  Prohibir la entrada a cualquier hora del día y de la noche en el dormitorio del paciente.




               Polen

               La  exposición  a  pólenes  puede  desencadenar  o  empeorar  los  síntomas  en  personas
               sensibilizadas. Los pacientes deben conocer cuál es la época de comienzo y duración del
               polen al que están sensibilizados según la zona geográfica en la que se encuentren, para
               poder tomar las medidas oportunas. No obstante estos periodos varían dependiendo de los
               años y la localización geográfica. Por este motivo resulta útil consultar los recuentos polínicos.
               El Comité de Aerobiología de la Sociedad Española de Alergia facilita los recuentos polínicos
               de varias estaciones: www.polenes.es

               La mayor parte de los árboles polinizan en la primavera, la hierba poliniza desde finales de
               primavera hasta principios de verano, y las malas hierbas polinizan a finales del verano hasta
               el otoño.

               Los pólenes más responsables de polinosis en España son: Ciprés (enero-marzo), Plátano
               de sombra (marzo-abril), Abedul (abril), Gramíneas y Olivo (abril  –junio), Parietaria (abril-
               julio), Chenopodium (julio-septiembre).

               La medida fundamental es evitar la exposición a los pólenes alergénicos, para ello

               se debe conocer el periodo crítico de polinización y extremar las precauciones en esta época:





                                                                                                      130
   129   130   131   132   133   134   135   136   137   138   139