Page 166 - ALERGIAS BÁSICAS
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3. Otros síndromes de inmunodeficiencia bien definidos.

               Tienen  aproximadamente  una  frecuencia  relativa  del  18%.  Suelen  cursar  con  una
               inmunodeficicia  predominantemente  celular.  Entre  ellos  se  incluyen  entidades  como  el
               Síndrome de Wiskott-Aldrich que se caracteriza por eccema, trombocitopenia e infecciones
               bacterianas  respiratorias.  Ataxia-telangiectasia  que  presenta  múltiples  telangiestasias
               oculares o cutáneas y ataxia cerebelosa, o el Síndrome de DiGeorge que se caracteriza por
               presentar cardiopatías congénita, hipoplasia tímica y de paratiroides junto con alteraciones
               fenotípicas  faciales.  Síndrome  Hiper-IgE  o  Síndrome  de  Job  se  caracteriza  por  tener
               concentraciones séricas altas de IgE (superiores a 2000 UI/ml) asociadas a la presencia de
               abscesos  recurrentes  de  tejidos  superficiales  y  profundos  debidos  especialmente  a
               Staphylococcus aureus. También presentan dermatitis crónica y neumopatías supurativas
               con una tendencia a la formación de neumatoceles persistentes.


               4. Defectos congénitos del número o función de los fagotitos.

               Se producen por ausencia de moléculas de adhesión o por alteración de la actividad oxidativa
               de  los  fagocitos.  Corresponden  al  11%  de  las  IDP  diagnosticadas.  Las  formas  de
               presentación son múltiples, desde pacientes que presentan úlceras aftosas recurrentes, a
               obstrucción de órganos huecos por la formación de granulomas, neumonías, abscesos de
               partes blandas y hepáticos, adenitis supuradas, osteomielitis, sepsis, gingivitis, periodontitis
               y retraso de la caída del cordón umbilical. Como ejemplos de los defectos de la fagocitosis
               están: Enfermedad granulomatosa crónica y Síndrome Shwachman-Diamond.

               5. Déficits congénitos del sistema del complemento.

               Estos defectos tienen aproximadamente una frecuencia relativa del 2-3%. Los déficit de los
               primeros factores del complemento (C1q, C1r, C1s, C2, C3, C4) cursan con infecciones

               recurrentes  por  bacterias  piógenas  y  síndromes  reumatoides  por  depósito  de
               inmunocomplejos.

               Las deficiencias de factor D y properdina se manifiestan por infecciones por Neisseria sp.
               Las  deficiencias  de  factores  tardíos  del  complemento  (C5,  C6,  C7,  C8,  C9)  cursan  con
               infecciones recurrentes por Neisseria sp. y enfermedades por inmunocomplejos. Por último,
               la deficiencia del inhibidor de C1 (C1 INH) se asocia a edema angioneurótico.

               6. Enfermedades por disregulación del sistema inmune.

               El  Síndrome  Chediak-Higashi  es  una  inmunodeficiencia  que  asocia  característicamente
               hipopigmentación y en la que se altera el tráfico lisosomal.


               Los  Síndromes  de  linfohistiocitosis  hemofagocítica  familiar,  donde  se  produce  una
               alteración de la función de las células NK. Se caracterizan por la proliferación benigna pero
               masiva  de  macrófagos  activados  en  la  médula  ósea,  el  bazo,  el  hígado  y  los  ganglios
               linfáticos.

               Las IDP por disregulación del sistema inmune son el 3% de las IDP.


               7. Defectos de la inmunidad innata.



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