Page 196 - ALERGIAS BÁSICAS
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● Historia clínica: debe reflejar las características y edad de presentación junto con los
antecedentes personales y familiares de atopia.
● Síntomas: el prurito, lagrimeo y la fotofobia son muy intensos.
● Signos: los párpados suelen presentar un aspecto eczematoso, y a menudo
colonizados por el Staphylococcus aureus. El edema palpebral crónico, produce el
signo descrito como “pliegue de Dennie-Morgan” a nivel infraorbitario. En la conjuntiva
existe una reacción tarsal de predominio inferior (a diferencia de la QCV) con
hipertrofia de papilas de < 1 mm de diámetro. La inflamación crónica de la superficie
de la córnea puede producir una queratitis epitelial punteada, más evidente en tercio
corneal inferior, que puede evolucionar a úlceras corneales. Los infiltrados límbicos o
puntos de Horner-Trantas, pueden aparecer, pero son menos frecuentes que en la
QCV.
Los trastornos del sistema inmune que suelen presentar estos pacientes, junto con la
necesidad de terapias corticoideas frecuentes, se traducen en un mayor riesgo de
sufrir algunas infecciones como queratitis herpética, queratitis micóticas, aparición de
catarata subcapsular posterior y glaucoma. Así mismo, se ha observado una relación
entre la QCA, la aparición de queratocono y el desprendimiento de retina.
● • Las pruebas cutáneas y los niveles de IgE específica pueden ser útiles para evaluar
la hipersensibilidad a algunos alérgenos. La IgE total sérica suele estar elevada, pero
no se correlaciona con la gravedad de los síntomas. A veces es preciso realizar una
biopsia conjuntival, como diagnóstico diferencial con otras conjuntivitis cicatrizantes.
Blefaroconjuntivitis de contacto
Se trata de una forma de dermatitis de contacto que afecta a la conjuntiva y a los párpados.
Puede aparecer en sujetos atópicos y no atópicos.
Se produce por una reacción de hipersensibilidad retardada de tipo IV, en la que las células
T reaccionan con haptenos (antígenos incompletos) los cuales se convierten en antígenos
completos, inmunogénicamente activos, cuando se unen a otras proteínas. El antígeno es
capturado por las células de Langerhans de la piel del párpado o de la conjuntiva y presentado
a los linfocitos T-colaboradores de los nódulos linfáticos regionales. Las células T
sensibilizadas liberan citocinas y factores quimiotácticos, con la consecuente activación de
células inflamatorias. La sensibilización puede desarrollarse en semanas o meses,
dependiendo de la concentración que tenga el alérgeno, de la preexistencia de enfermedad
en los párpados o en la conjuntiva, así como de la propia susceptibilidad del paciente. En las
personas sensibilizadas la respuesta inmune tarda en manifestarse de 48 a 72 horas, a
diferencia de las reacciones tóxicas o irritativas que se manifiestan en 2 o 3 horas.
Los productos que pueden actuar como antígenos son numerosos:
● Midriáticos: atropina, homatropina, tropicamida, escopolamina.
● Antibióticos: aminoglucísidos, sulfamidas, polimixina.
● Antivirales: idoxuridina, trifluridina, vidarabina.
● Antiglaucomatosos: carbacol, brimonidina, apraclonidina, dorzolamida.
● Conservantes: thiomersal, cloruro de benzalconio, clorhexidina, EDTA.
● Anestésicos: procaína, tetracaína.
● Otros: fenilefrina.
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