Page 104 - ALERGIAS BÁSICAS
P. 104

GENÉTICA Y MEDIO AMBIENTE EN LAS ENFERMEDADES ALÉRGICAS


               Como se ha dicho, las enfermedades alérgicas, como el resto de enfermedades genéticas
               complejas, son el resultado de la interacción entre un determinado sustrato genético individual
               y  determinadas  influencias  ambientales  que  se  producen  a  lo  largo  de  la  vida.  Se  han
               evaluado múltiples factores ambientales responsables de esta interacción, tales como los
               alérgenos,  la  dieta,  los  virus  respiratorios,  los  contaminantes  ambientales,  el  tabaquismo
               pasivo, la exposición a endotoxina y las exposiciones ambientales. El comentario de todos
               ellos excede el objetivo de este capítulo, bastará citar algunos ejemplos. Así, determinados
               polimorfismos en CD14, el receptor del LPS, o en receptores de tipo Toll, como TLR4 pueden
               modificar  las  asociaciones  con  el  riesgo  de  desarrollar  enfermedades  atópicas  o  asma,
               particularmente en ambientes rurales, si se realiza un consumo de leche fresca o si existe
               exposición doméstica a LPS. Otro posible ejemplo serían los estudios genético-ambientales
               sobre los efectos de la contaminación ambiental sobre el desarrollo de asma: se ha podido
               observar que determinados polimorfismos en genes que codifican enzimas como la glutatión
               transferasa, que participa en proceso de detoxificación, influyen en el efecto que un ambiente
               contaminado puede ejercer sobre el riesgo de desarrollar asma en la infancia.





               EPIGENÉTICA: PUENTE ENTRE EL GENOTIPO Y EL FENOTIPO

               El término epigenética se atribuye a Conrad Waddington para describir aquellos eventos que
               no podían explicarse por principios genéticos (algo que va más allá o que está por encima de
               la propia genética; del griego “epi-“, “en” o “sobre”). Una definición más reciente, actualizada
               y simplificada es la de Alan Wolffe (1999), quien los define como “cambios hereditarios en la
               expresión génica que ocurren sin producir cambios en la secuencia del ADN”.


               La  herencia  epigenética  se  asegura  por  mecanismos  que  mantienen  los  programas  de
               desarrollo, en los cuales no sólo se hereda el genoma, sino también el programa específico
               de  expresión  génica  y  desarrollo  celular.  La  herencia  epigenética  incluye  dos  campos
               mecanísticamente interrelacionados, siendo el denominador común de ambos el hecho de
               que los mecanismos hereditarios que determinan la expresión génica no están relacionados
               con cambios en la secuencia del ADN:

               a)  Herencia epigenética  mitótica. La expresión génica  cambia  durante la diferenciación
               celular, transmitiéndose a las células hijas a través de la mitosis. Este campo incluye los
               mecanismos hereditarios que intervienen en la regulación de la expresión génica durante el
               desarrollo.  Durante  la  diferenciación  celular  aparecen  nuevas  estructuras,  quedando
               retenidas las modificaciones, siendo así como tejidos y órganos se desarrollan a partir de
               células madre.


               b) Herencia epigenética meiótica. Los cambios en la expresión génica aparecidos durante
               la ontogenia del individuo pueden heredarse a través de generaciones, siendo transmitidos
               por meiosis. Este campo incluye los mecanismos de transmisión hereditaria de la regulación
               génica de genes individuales a través de las células de la línea germinal.







                                                                                                      100
   99   100   101   102   103   104   105   106   107   108   109