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Si las tortugas tuvieran que encontrarse para procrear en cada es- abarca desde un mismo periodo reproductivo hasta cuatro años
tación de apareamiento, la especie tardaría poco en desaparecer de duración. El modelo Stepland simula y prevé el comportamien-
de la península. El rasgo evolutivo clave y “secreto” de la supervi- to futuro de las poblaciones de tortuga mora en un escenario de
vencia de la tortuga mora, de las más extendidas y conocidas, se cambio climático, contaminación creciente y pérdida de hábitat por
halla en la capacidad de la hembra para almacenar los esperma- incendios, sequías o la acción del hombre. La investigadora del
tozoides del macho durante, al menos, cuatro años. Esta es una Área de Ecología de la UMH y autora principal del estudio María
de las conclusiones de un estudio en el que participan investiga- Victoria Jiménez Franco señala que, según el programa Stepland,
dores de la UMH, la Universidad de Illes Balears, la Universidad si se disminuye la capacidad de almacenar esperma a un solo
de Zaragoza, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y periodo reproductivo, muchas de las poblaciones de tortuga mora
el Instituto de Investigación Ambiental UFZ de Leipzig (Alemania). se extinguirían en unos 200 años.
Frente a la vida útil de sólo unos pocos días del esperma de los Este rasgo biológico permite a la especie compensar su baja ca-
humanos, la tortuga mora es capaz de almacenar el semen del pacidad de desplazamiento, ya que puede llegar a pasar su vida
macho hasta 48 meses en óptimas condiciones. Aunque este ras- en 0,2 hectáreas, en las cuales puede ser difícil el encuentro de
go biológico es poco conocido en reptiles, el mecanismo consiste pareja para la reproducción. La investigadora de la UMH Jiménez
en almacenar el esperma en unos túbulos en la zona del oviduc- Franco explica que “la espermateca es el rasgo evolutivo clave
to del aparato genital femenino. De esta forma, cuando el óvulo para el mantenimiento de las poblaciones de tortuga mora y, tam-
madura en el ovario, baja por el oviducto pudiendo ser fertilizado bién, hemos descubierto que este factor puede ser relevante de
con el esperma almacenado. Este rasgo biológico permite que la cara al futuro en el actual contexto de pérdida y fragmentación de
hembra pueda efectuar entre dos y tres puestas cada primavera su hábitat, que aísla a las tortugas”.
(con una media de 3 o 4 huevos cada una) durante cuatro tem-
poradas sin necesidad de aparearse. Esta cualidad ha influido Este estudio puede servir de modelo para predecir la superviven-
decisivamente en que esta especie haya sobrevivido los últimos cia de otras especies. Pero aún se desconoce mucho de esta
5 millones de años, aunque, actualmente, vive amenazada por característica que, entre otras consecuencias, a menudo da ori-
la pérdida y fragmentación de su hábitat y el tráfico de animales, gen a una paternidad múltiple, de manera que los huevos de una
pese a que está prohibido tenerla en casa con penas de entre 6 y puesta pueden provenir de diferentes machos reproductores (de
24 meses de cárcel. los últimos cuatro años). Otro de los aspectos a indagar es si en
el ámbito de la espermateca de las tortugas, se produce un fenó-
Para saber si la capacidad de almacenar esperma, y no otro rasgo meno de “competencia espermática”, por la cual algunas células
evolutivo, es lo que ha permitido la supervivencia de la especie, reproductivas masculinas se imponen a la hora de la fecundación
se ha desarrollado una investigación, publicada en la revista cien- o si ésta se produce en función de si el apareamiento ha sido más
tífica “Ecology and Evolution” y titulada “El almacenamiento de o menos reciente.
esperma reduce la fuerza del efecto Allee para encontrar pareja”.
En dicho trabajo, la UMH ha desarrollado un modelo basado en el Origen y evolución de la especie
individuo denominado Stepland y se han simulado por ordenador La tortuga mora, originaria hace 5 millones de años en el Cáucaso,
varios escenarios poblacionales a futuro. Para ello, se ha conside- tiene poblaciones naturales en diversos puntos de Asia, África y
rado la diferente viabilidad del almacenamiento de esperma que Europa. En España solo hay dos especies de tortugas terrestres,
la mediterránea y la mora. Esta última habita desde hace unos
20.000 años en el sureste peninsular entre la Región de Murcia
y Almería y, desde tiempos históricos, en Mallorca y en el Parque
Nacional andaluz de Doñana, además de Ceuta y Melilla. Esto
plantea dudas sobre su verdadero origen. Si la misma subespecie
está presente también en el norte de África, ¿la tortuga mora se
trata de una especie autóctona o introducida?
Por el momento no hay identificados fósiles de tortugas moras
en la península ibérica. Los primeros estudios genéticos conclu-
yeron que las tortugas moras llegaron a Europa occidental tras
la apertura del estrecho de Gibraltar en el Mioceno, hace unos
5 millones de años y provenían de las poblaciones del norte de
África. Esta especie quedó catalogada como “introducida” en la
península, pero se desconocía la posible mediación del ser hu-
mano en su expansión local en el sureste ibérico, principalmente
Murcia y Almería.
Los investigadores de la UMH analizaron más de 400 ejemplares
en 18 emplazamientos en el sureste ibérico, Marruecos y Argelia.
Con distintas técnicas de análisis genético, hicieron un seguimien-
to de las mutaciones de la especie en el corto y en el largo plazo.
Al distinguir genéticamente las tortugas ibéricas de las norteafri-
canas, se dieron cuenta de que el ser humano sigue influyendo en
la distribución de estas poblaciones, puesto que algunos ejempla-
res habían sido introducidos recientemente. También, descubrie-
María Victoria jiménez
Investigadora del Área de Ecología UMH ron que el origen de la población del sureste peninsular podría ha-
llarse en una región cercana a Orán (Argelia) y su punto de llegada
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