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Comunicación

Científica

↪ @SantiGarciaCC
La columna de Santi García Matemático y divulgador científico.
Profesor de la UMH y autor de
“Un Número Perfecto”.

La Curva

de la Muerte

os datos nos hablan, todos los días, a todas horas.
Otra cosa es que no queramos oírlos, o seamos mio-
pes a ellos y los veamos borrosos. Siempre me gus-
tó ese concepto: las matemáticas son las gafas que
nos faltan para ver con nitidez el mundo que nos ro-
dea. No sé si tatuarme la frase o dejarla aquí, pero el
concepto me parece acertado. Ahora, más que nun-
Lca, se habla de datos por todos lados. Tenemos los
números cada día de infectados, fallecidos, recuperados, personas
en la UCI, hospitalizados… y todo esto, por países, por comunidades,
por provincias, incluso desagregados por edades. Tenemos muchos
datos y, por tanto, mucho que estudiar. Vamos a ponernos esas gafas
y entender qué es lo que está pasando en esta Guerra Mundial contra
el SARS-CoV-2.

Hay curvas por todos lados. A mí mismo me han llamado el “chico de es la curva que tenemos. Pues si nos confinamos el día 14 de marzo (el
la curva”, no sé si será por los kilos que estoy cogiendo (ya los soltaré día Mundial de las Matemáticas, por cierto, no muy celebrado como
por algún sitio). Hemos pasado de “en esa curva me maté yo” a “¿qué es natural), el día 24 de marzo vimos un efecto directo en esta medida.
pasa con esa curva?”. Es un tema complejo y, sobre todo, dramático, La curtosis pasó de decirnos que estábamos en una curva afilada a un
pero si algo nos han enseñado nuestros mayores es a aprender de la momento aplanado de la curva de infectados o fallecidos diarios. Por
experiencia y a recuperarnos de los golpes de la vida. Entonces, va- tanto, QED, queda demostrado, hemos conseguido aplanar la curva.
mos a aprender de los errores cometidos, de lo que se ha comunicado Primero crecer rápido, y luego lento.
mal o no se ha entendido bien. Empecemos primero por el inicio de la
pandemia, el momento “exponencial”. Ahora toca el momento clave, la luz al final del túnel. La curva no dejó
de crecer hasta el 31 de marzo de 2020, lo que conocemos como el
Al principio de un contagio, todas las cifras suben rápido, se duplican, punto máximo de la curva. En modelos epidemiológicos, se entien-
se triplican e incluso se cuatriplican en un solo día, y eso no puede de que sería el punto de inflexión de la pandemia, “de ahí p’abajo”.
ser para siempre. A eso le llamamos el factor de contagio, en epide- Bueno, eso es una medida a ojímetro, pero ¿podemos saber cuánto
miología se conoce como R0 (el número de personas que se estiman queda de estas cifras tan duras? Difícil, pues la curva no es simétrica,
que contagia cada persona infectada). Si ese factor de contagio fuese no es una campana de Gauss, como muchos han dicho. Además, el
constante durante toda la pandemia, estaríamos perdidos, y estaría- momento alto de las cifras de infectados y fallecidos se ha mantenido
mos hablando de una función exponencial. Por poner un ejemplo, si más tiempo del que nos gustaría, es una consecuencia de aplanar la
cada contagiado hubiera contagiado a 2 personas cada día, en 33 curva, que la meseta dura más en el tiempo. Pero la bajada está ahí, la
días estaríamos más de 8 mil millones de personas contagiadas, más tendencia decreciente también está, estamos bajando y las gafas me
gente que hay en la Tierra. Entonces, no es exponencial, el factor de hacen ver una lucecita al final. Y ahora nos queda un momento clave:
contagio es dinámico. Primer aprendizaje: crecíamos rápido, pero no la victoria final.
exponencial.
Seguramente, cuando estés leyendo esto, ya estemos en cifras bajas,
Después, nos confinamos. Según estadísticas de movilidad que sacó pero los rebrotes van a existir. Ninguna pandemia se ha superado sin
Google en marzo y abril, estuvimos entre los 4 países del mundo que una cierta inmunidad de grupo, y esto no se consigue a la primera,
más han respetado el confinamiento. Y eso tiene un efecto claro: el fa- además, la vacuna tiene sus tiempos y nos quedan mínimo 10 meses
moso “aplanamiento de la curva”. Está claro que necesitábamos apla- de batalla contra el virus. La palabra clave en estos días es “MONITO-
nar la curva para no saturar el sistema sanitario y poder atender a los RIZAR”. Es decir, seguir con estas gafas todo lo que está pasando, no
casos más graves. Hemos conseguido, entre todos, que unas cifras hay otra solución. Los datos nos hablan, todos los días, a todas horas
que crecían muy rápido (no exponencialmente, pero rápido) se ralen- y, ahora más que nunca, necesitamos escucharlos. Es una clara ven-
tizasen. Esto se puede medir a través de una medida clásica en esta- taja ante el virus que, aunque lleve corona, no lleva gafas y creo que
dística, la curtosis. La curtosis mide cuánto de afilada o de aplanada es sordo y poquito hijode…

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